Inconmensurable
Hiperrealista
“Murieron con las letras puestas”. Madre mía, se va a quedar pistojo así toda la eternidad.
Con
Señoras:
Ésta en concreto es la versión picapedreada de Caterina Campodonico, una castañera que solía regalar castañas a Verdi cuando éste era estudiante y no tenía ni una perra gorda. Cuando Giuseppe se hizo famoso, hizo que la castañera estuviera invitada de por vida a sus óperas (es de biennacidos ser agradecidos). La estatua se la fue pagando ella al escultor poco a poco, pero como la mujer murió sin haber acabado de saldar su deuda, todos aquellos que la conocieron donaron el dinero que faltaba para que el escultor terminara la estatua de quien alimentó a Verdi cuando éste no era Verdi sino simplemente otro Giuseppe más y tenía ni dónde caerse muerto.
Señores:
Claramente el señor le está pidiendo al ángel que, por favor, le sirva la última, ¿no? Pero el ángel, que ya está muy curtido, le responde que en la eternidad no tienen sentido conceptos como “última” o “primera”, que, en todo caso, hable con San Miguel.
Y señoritas:
Que no parecen estar sufriendo mucho, la verdad, sino más bien todo lo contrario.
Ah, y relicarios con forma de biberón luminoso. Aparece de nuevo el apasionante tema de los objetos a los que atribuimos ciertas propiedades mágicas o un poder que va más allá de su uso cotidiano.
Gracias por las fotos, Ana, y gracias por las fotos, Ale.
Esta fosacomun declara aquí y ahora (pase, señor notario) que está encantada de lo bien dispuestos que están todos uds visitándonos, escribiéndonos, haciendo fotos de cementerios en sus viajes, enviándonos todo tipo de material fosacomunal… Como diría Sico, son uds lo más.
Qué efecto tan raro provoca el mirar las fotos de este post y las del anterior alternativamente.
Ya, y eso que al fin y al cabo (o al fin y al finado) todos son/están muertos, pero, sí, es como intentar ver con un ojo una peli del Oeste con parajes polvorientos y con el otro una peli italiana sobre fatales secretos de la saga familiar.
Ja, ja, ja. Exactamente así, claro. Por un lado Quiero la cabeza de Alfredo García y por otro Confidencias.
El cementerio es MUY bonito, mil gracias Ana!!!
Me chocan un poco las fotos finales
¿Los relicarios no tienen trocitos del cuerpo? ¿tendrán esos biberones recortes de uñas o pelos del papa?
Veo una tarea: seguir a los santos a la peluquería con un kit de cepillo y bolsita csi
Pues a pesar de la fascinante posibilidad de que los trocitos sobrantes de Jeanpol II sean luminosos cual luciernagas místicas, si leyenda de “durata 8 giorni” es cierta, lo único que deben llevar son pilas, eso sí, las amortizas que es un complemento ideal, lo mismo te sirve para un concierto dance que para la Sor de turno